En la mayoría de los países en desarrollo, la leche de bovino es producida por pequeños agricultores y la producción lechera contribuye a los medios de vida, la seguridad alimentaria y la nutrición de los hogares. La leche produce ganancias relativamente rápidas para los pequeños productores y es una fuente importante de ingresos en efectivo.
De acuerdo a estudios científicos, la leche de vaca es uno de los alimentos más completos de la dieta de un ser humano debido a que contiene una gran cantidad de nutrientes, proteínas y calcio, por lo que se considera imprescindible para el crecimiento y fortalecimiento de nuestros huesos, sin embargo, hay una parte de la población que es intolerante a la lactosa o bien, por ciertos motivos de salud o ecológicos evitan consumirla.
En las últimas décadas, el consumo mundial de leche y sus derivados se ha ido incrementando principalmente en los países en desarrollo, debido a una gran variedad de productos que contribuyen a mejorar las condiciones de salud de la población, no solo con productos lácteos reducidos en grasa o azúcar, sino con algunos componentes como lo son vitaminas, pre y probióticos o fibra, los cuales mejoran la dieta de los consumidores y se pueden adquirir en quesos, yogures, mantequilla y otros derivados.
Países como Estados Unidos producen un gran volumen de leche, por lo que sus excedentes terminan vendiéndose en el mercado internacional con grandes subsidios, distorsionando fuertemente los precios del producto en los mercados mundiales.
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, México es uno de los países con los mayores déficits de leche, así como China, Italia, la Federación de Rusia, Argelia e Indonesia.
El departamento de Agricultura de Estados Unidos destaca que la producción de leche vacuna en 2021 fue de poco más de 102 millones 600 mil litros, mientras que, en ese mismo año, la producción nacional según cifras del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) fue de 12 millones 851 mil toneladas.
En México en los últimos años se ha recurrido a la importación creciente de leche en polvo y derivados lácteos lo cual, según los ganaderos lecheros, ha ocasionado una disminución del precio nacional de la leche producida en nuestro país provocando en gran medida la quiebra y cierre de una importante cantidad de unidades de producción.
En julio de este año, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el gobierno seguirá adquiriendo leche de productores mexicanos a precios justos con el establecimiento de precios de garantía y subrayó que los acuerdos de compra del producto con Estados Unidos no afectarán en nada a la industria nacional, ya que dijo, solo se adquiere para evitar el desabasto porque “no somos autosuficientes” y se deben mantener los precios.
“No queremos que nos falte, lo que falta para que no tengamos desabasto y podamos mantener los precios en las lecherías Liconsa, se mantiene el precio de garantía que hemos estado incrementando para que ellos se beneficien”, destacó el mandatario.
El gobierno federal se comprometió a adquirir hasta 20 mil toneladas de leche en polvo para Lincosa y destinarlas a las familias que viven en comunidades rurales y urbanas, aunque un mes después, Leonel Cota Montaño, director general de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) informó que como parte de los acuerdos del jefe del Ejecutivo con la Unión Americana se acordó importar leche en polvo de ese país y de forma inicial “vamos a adquirir 20 mil toneladas este fin de año, factiblemente 30 mil toneladas para el inicio del 2023”.
Específicamente en Querétaro, ganaderos y en especial los lecheros están al borde de la desesperación, así lo declaró recientemente ante autoridades estatales, el presidente nacional de Hostein de México, Esteban Posada Renovales, “todos los sectores productivos han sido golpeados (con recortes presupuestales), pero parece que con el sector ganadero, y en especial el lechero se ensañaron(…). Es beneficio de todos los mexicanos invertir en este sector, es necesario y lo pedimos y lo imploramos”.
Añadió que hay un excedente de inventarios de quesos en Estados Unidos, por lo que están fomentando la exportación de ellos, destacó que el 79% de los que se consumen en México provienen de nuestro vecino del norte, “imaginen si tuvieran subsidio, sería un tremendo golpe”.
El empresario recordó que los ganaderos tienen un compromiso de proveer de leche fresca a todo México pero “no lo podemos hacer perdiendo dinero, y mucho menos si nos enteramos que se ha tomado la decisión de importar 50 mil toneladas de leche en polvo que, no es para cubrir el desabasto, sino para bajar el precio en el mercado nacional, esto ocasionará que muchos productores quiebren y dejen la actividad, con la consecuencia de pérdida de fuentes de empleo”.
De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad Autónoma de Coahuila los productores están siendo duramente golpeados por las importaciones, por lo que recomienda implementar medidas para reducirlas tanto en leche en polvo como en derivados lácteos o, en su caso, implementar medidas de política pública de apoyo a los productores nacionales.
Cabe señalar que Liconsa es, tal y como lo detalla en su portal, una empresa de participación estatal mayoritaria que industrializa leche y la distribuye a precio subsidiado en apoyo a la nutrición de los mexicanos, especialmente de niños de hasta 12 años, de familias en condiciones de pobreza, contribuyendo al desarrollo del país y que, en forma complementaria lleva a cabo la adquisición de leche nacional en apoyo a la comercialización de lácteos producidos por ganaderos nacionales.
Liconsa tiene un precio de garantía de 10 pesos por litro de leche a nivel nacional, sin embargo, de acuerdo a Jorge Alejandro Ugalde Tinoco, presidente de la Unión Ganadera Regional de Querétaro, UGRQ, no están recibiendo dicho pago por litro, indica que la media, es de 60 centavos menos, motivo por el que los productores prefieren vender su leche por fuera, es decir, no venderla a los centros de acopio que existen de Liconsa del estado que son tres y se ubican en Colón, Corregidora y Amealco.
“La realidad es que no los paga a 10 pesos, traemos un precio promedio que está pagando en los acopios de $9.40 (…) pero básicamente ya no están acopiando porque los productores están encontrando un mejor mercado por fuera. Se los están pagando alrededor de $10.50(…) por eso los productores han optado por mandar su producto principalmente a la gente que labora quesos”, así lo destacó el presidente de la UGRQ.
Añadió que en Querétaro se produce más o menos un millón 200 litros diarios, el detalle es que está muy disperso todo el padrón ganadero, existen alrededor 925 unidades de producción dedicadas a la producción de leche, es decir, aproximadamente el 75% de nuestros productores tienen menos de 50 vacas, que precisamente son los que se ven más afectados por el precio de venta.
“Entre más pequeños, todavía muchísimo más vulnerables son (los productores) y su costo de producción es muchísimo más alto, no es lo mismo trabajar para una empresa donde acopien y les ayuden, incluso con algunos créditos a que estén trabajando solos (…). Han encontrado un mercado bastante atractivo para la gente que elabora quesos y eso nos ha ayudado, es lo que ha ayudado a los pequeños productores”.
Resalta Ugalde Tinoco que las políticas públicas que está implementando el gobierno federal en cuanto a precios de garantía, principalmente de leche “andan mal”, incluso hizo referencia a la importación que hizo el gobierno y destacó que si así pagaran, como pagan al exterior, otra cosa sería el tema del acopio aunado a que abonaría por mucho a la economía nacional, “sabemos de buena fuente que estos los pagó a 12.50 (pesos) al exterior, si a ese precio los hubiera pagado a los productores de aquí del estado, bueno de todo el país, pues se hubieran acopiado muchísimos litros”.
El costo de producción es de alrededor de 10 pesos y el hecho de que Liconsa pague el litro a ese mismo precio no genera ganancia alguna, por lo que el llamado del sector va en función a que “le subieran dos pesos, que lo pusiera a 12 pesos el pago al productor y yo creo que las condiciones serían diferentes”.
Cabe señalar que, como todo producto al deshidratarse, en este caso la leche de vaca, se pierden muchas propiedades nutricionales, no es lo mismo utilizar las aportaciones que tiene la leche fresca a una leche hidratada, incluso, esa leche que llega a nuestro país en polvo, al hidratarse, se le tienen que anexar ciertos productos, lo que termina incrementando los costos.
El sector lechero es clave en el crecimiento de Querétaro tan solo en 2021, ocupó el lugar 12 a nivel nacional, con un volumen de producción de 408 mil millones de litros al año.
Debido a que muchos de los pequeños ranchos productores han tenido que desaparecer debido a la falta de apoyos al sector y a la competencia que definen como “desleal” al importar el producto de otros países, es de vital importancia unir esfuerzos entre productores y gobierno e implementar políticas públicas para fortalecer la cadena de producción.
por Lu García
